Si quieres mejorar el posicionamiento de tu web, es imprescindible que realices un análisis SEO periódicamente. Con este proceso, podrás detectar las fortalezas y debilidades de tu sitio, así como las oportunidades y amenazas que te ofrece el mercado. En este artículo, te voy a explicar cómo hacer un análisis SEO de tu web paso a paso, y qué herramientas puedes utilizar para facilitarte el trabajo. Además, te daré algunos consejos para optimizar tu web y mejorar tu ranking en los buscadores.
¿Qué es un análisis SEO y para qué sirve?
Un análisis SEO es un estudio exhaustivo de los diferentes factores que influyen en el posicionamiento orgánico de una web. Estos factores se pueden clasificar en dos grandes grupos: los factores internos y los factores externos.
Los factores internos son aquellos que dependen de la propia web, como la estructura, el contenido, la velocidad de carga, la usabilidad, etc. Estos factores se pueden controlar y mejorar con una buena estrategia de SEO on page.
Los factores externos son aquellos que dependen de otros sitios web, como los enlaces entrantes, la autoridad de dominio, la reputación online, etc. Estos factores se pueden influir con una buena estrategia de SEO off page.
El objetivo de un análisis SEO es identificar los puntos fuertes y débiles de cada uno de estos factores, y establecer un plan de acción para mejorarlos. De esta forma, se puede aumentar la visibilidad de la web en los resultados de búsqueda, y atraer más tráfico cualificado.
¿Cómo hacer un análisis SEO de tu web?
Para hacer un análisis SEO de tu web, necesitas utilizar algunas herramientas que te ayuden a recopilar y analizar los datos. Algunas de las más populares son:
- Google Analytics: te permite medir el tráfico y el comportamiento de los usuarios en tu web, así como las fuentes de tráfico, las conversiones, las páginas más visitadas, etc.
- Google Search Console: te permite monitorizar el rendimiento de tu web en los resultados de búsqueda de Google, así como detectar posibles errores, penalizaciones, problemas de indexación, etc.
- SEMrush: te permite analizar la competencia, las palabras clave, los enlaces entrantes, la autoridad de dominio, etc.
- Screaming Frog: te permite hacer un rastreo completo de tu web y obtener información sobre la estructura, el contenido, los metadatos, los enlaces internos y externos, etc.
Con estas herramientas, puedes hacer un análisis SEO de tu web siguiendo estos pasos:
Análisis de palabras clave
Las palabras clave son los términos que utilizan los usuarios para buscar información en internet. Por eso, es fundamental que sepas qué palabras clave son relevantes para tu negocio, y cómo se comportan en los buscadores.
Para hacer un análisis de palabras clave, puedes utilizar herramientas como SEMrush o Google Keyword Planner. Con ellas, puedes obtener información sobre:
- El volumen de búsqueda: es el número de veces que se busca una palabra clave al mes.
- La dificultad: es el nivel de competencia que tiene una palabra clave para posicionarse.
- La intención: es el objetivo que tiene el usuario al buscar una palabra clave (informativo, comercial, transaccional, etc.).
- El CPC: es el coste por clic que tiene una palabra clave en Google Ads.
Con esta información, puedes seleccionar las palabras clave más adecuadas para tu web, teniendo en cuenta su relevancia, su potencial y su rentabilidad. Además, puedes agruparlas por temáticas o categorías, y asignarlas a las diferentes páginas o secciones de tu web.
Análisis de la competencia
La competencia son aquellos sitios web que ofrecen productos o servicios similares a los tuyos, o que comparten las mismas palabras clave. Por eso,
es importante que analices su estrategia SEO y sus resultados para saber qué están haciendo bien y qué puedes mejorar.
Para hacer un análisis de la competencia, puedes utilizar herramientas como SEMrush o Ahrefs. Con ellas, puedes obtener información sobre:
- El tráfico orgánico: es el número de visitas que recibe una web desde los buscadores.
- Las palabras clave orgánicas: son las palabras clave por las que se posiciona una web en los buscadores.
- Los enlaces entrantes: son los enlaces que apuntan a una web desde otros sitios web.
- La autoridad de dominio: es una puntuación que indica el nivel de confianza y relevancia que tiene una web para los buscadores.
Con esta información, puedes identificar las fortalezas y debilidades de tu competencia, y detectar las oportunidades y amenazas que te ofrece el mercado. Además, puedes inspirarte en sus contenidos, sus enlaces y sus buenas prácticas para mejorar tu estrategia SEO.
Análisis de la web
La web es el elemento central de tu estrategia SEO, ya que es donde se aloja tu contenido y donde se dirige tu tráfico. Por eso, es esencial que analices su estado y su rendimiento para optimizarla al máximo.
Para hacer un análisis de la web, puedes utilizar herramientas como Google Analytics, Google Search Console y Screaming Frog.
Con ellas, puedes obtener información sobre:
- La indexación: es el proceso por el que los buscadores rastrean e incluyen tu web en su índice. Es importante que tu web esté bien indexada para que pueda aparecer en los resultados de búsqueda.
- La estructura: es la forma en la que se organizan las páginas y secciones de tu web. Es importante que tu web tenga una estructura clara y lógica para facilitar la navegación de los usuarios y de los buscadores.
- El contenido: es el texto, las imágenes, los vídeos y otros elementos que componen tu web. Es importante que tu web tenga un contenido original, relevante, actualizado y optimizado para las palabras clave.
- Los metadatos: son los datos que describen el contenido de tu web, como el título, la descripción, las etiquetas, etc. Es importante que tu web tenga unos metadatos adecuados para mejorar el CTR (click through rate) y el posicionamiento.
- Los enlaces internos: son los enlaces que conectan las diferentes páginas o secciones de tu web. Es importante que tu web tenga unos enlaces internos coherentes y estratégicos para mejorar la experiencia de usuario y el SEO.
- La velocidad de carga: es el tiempo que tarda tu web en mostrarse completamente al usuario. Es importante que tu web tenga una velocidad de carga rápida para reducir la tasa de rebote y mejorar el SEO.
- La usabilidad: es el grado de facilidad y satisfacción con el que los usuarios interactúan con tu web. Es importante que tu web tenga una buena usabilidad para fidelizar a los usuarios y aumentar las conversiones.
- La adaptabilidad: es la capacidad de tu web de adaptarse a diferentes dispositivos y tamaños de pantalla. Es importante que tu web sea responsive o adaptable para mejorar el SEO móvil y la experiencia de usuario.
Con esta información, puedes detectar los problemas o errores que pueda tener tu web, y aplicar las soluciones o mejoras necesarias para optimizarla.
